Los tiempos son cíclicos. Un buen ejemplo de esto son las estaciones del año o las temporadas de sequía y lluvia en distintos sectores del país. Sin embargo, este concepto, también, alude a los eventos históricos y sociales. En este caso, el tema del estatus colonial de Puerto Rico vuelve a ser discutido en foros congresionales con potencial de convertirse en legislación. Aun falta tramo por recorrer para vernos en una situación parecida a los anos 1989-1991 cuando se discutió el proyecto del senado 712 conocido como The Puerto Rico Status Referendum Act. Hoy, el Congreso federal intenta vincularse en el proceso -cosa que le corresponde y tiene deuda hace más de 100 años- con esta pieza presentada para llevar a cabo un referéndum en noviembre del 2023.
El proyecto es crucial si las partes implicadas lo asumen con la responsabilidad que amerita. Por un lado, nos toca a todes Les Puertorriqueñes unirnos en una sola voz para exigir la descolonización de la colonia más antigua del mundo. El primer paso que debemos asumir como Pueblo es dejar a un lado, de manera temporera, las diferencias ideológicas. Nos urge llevar un reclamo hacia la descolonización ante el foro federal. Luego, cada persona, grupo o partido político se irá a su trinchera y emitirá su voto por lo que entienda es más conveniente para la Patria.
La independencia, la libre asociación y la estadidad son las alternativas presentadas por la Cámara de Representantes Federal. Para las personas que insisten en incluir al ELA deben pasar la página y asumir la responsabilidad histórica de reconocer que el estatus ya no existe y los tiempos actuales exigen posturas claras. Es decir, el problema de la colonia no se puede resolver con la colonia como opción. Para los estadistas, les toca elaborar el plan hacia ese fin. A les que exigimos la independencia para Puerto Rico tenemos el proyecto descrito con sus puntos y sus íes. Pero antes de llegar a ese punto, la alianza como Pueblo nos llama. Primero el País, luego hacia dónde lo queremos llevar. Un paso a la vez para cerrar finalmente este tedioso ciclo colonial de 124 años.
Por Angel Comas - Presidente PIP en Ponce
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